Taladrar madera es fácil y puede resumirse en unos pocos consejos fáciles de recordar. Sin embargo, alguno de ellos es fundamental para el correcto perforado de la madera ¡No te los pierdas!
Elegir la broca adecuada para madera
Utilizar cualquier broca para taladrar madera no es aconsejable. Una broca para madera tiene un diseño específico que garantiza que el perforado se realice con la mayor eficacia y eficiencia posibles. Hay muchos tipos de brocas para madera, pero la más común es la broca para madera “estándar”, que puedes reconocer por su afilada punta de centrado que te permite taladrar exactamente en el punto correcto sin que la broca se mueva a los lados.
Elegir el taladro ideal para trabajar en madera
Este consejo puede parecer menos importante, ya que prácticamente cualquier taladro (desde el más barato al más caro) puede perforar madera. Sin embargo, si vas a trabajar intensivamente la madera, lo ideal es contar con un taladro inalámbrico ideal para madera.
Pretaladrar la madera
Uno de los mejores consejos para taladrar madera es el de perforar previamente la madera. Si por mala suerte o mala práctica perforas mal, no hay forma de volver a cerrar el agujero. Si taladras con una broca demasiado ancha, especialmente en maderas más duras, la madera podría astillarse o agrietarse. Como en tantos trabajos de taladrado, nuestro consejo para la madera es pretaladrar. ¿Quieres hacer agujeros de 10 milímetros o más? Utiliza primero una broca de 4 ó 5 milímetros.
Cuando utilices tornillos, lo ideal es que también pretaladres. Para ello, debes utilizar un diámetro de broca ligeramente inferior al tamaño interior del tornillo. Por ejemplo, si tienes tornillos de 3,5 milímetros, pretaladra con una broca de 3 milímetros
Elegir las RPM adecuadas
Encontrar las RPM adecuadas para taladrar madera puede ser una tarea bastante precisa. Si taladras demasiado rápido, lo más probable es que tu madera se queme. Si taladras demasiado despacio, es posible que el agujero no quede tan bien. Esto último puede no parecer tan malo si después cubres el agujero con un tornillo, o si este agujero no iba a ser visible en absoluto de todos modos. Encontrar la velocidad adecuada es sobre todo una cuestión de experiencia. Sin embargo, recomendamos empezar despacio y aumentar la velocidad con cuidado. La madera blanda te permitirá alcanzar una velocidad relativamente alta de este modo. Con la madera más dura, esto no será posible, porque el taladro simplemente no atravesará el material con tanta facilidad.
Eliminar el polvo
Si estás taladrando un agujero, lo que había en el agujero tendrá que ir a otra parte. Parece que tiene sentido, y lo tiene. Si prefieres hacer el bricolaje de la forma más limpia posible, haz que alguien sostenga una aspiradora justo debajo del taladro para eliminar enseguida el polvo o las virutas de la perforación. Una gran parte del polvo se escurrirá entre las ranuras en espiral de la broca. Sin embargo, para un taladrado óptimo, no está de más tirar un poco de la broca hacia atrás cada 2 ó 3 centímetros al taladrar madera. De este modo, perforarás más rápido y evitarás el sobrecalentamiento de la broca.